La clave para un maquillaje con acabado glass skin o "piel de porcelana" está en a preparación previa de la piel. Esta rutina de cuidado facial os ayudara a conseguir ese efecto jugoso, translúcido y saludable que está tan de moda. ¡Seguir este paso a paso!
1. Limpieza suave pero profunda.
Una piel limpia es el primer paso para lograr una base luminosa. Usar un limpiador suave, tipo gel o crema, que elimine impurezas sin resecar. Si usáis doble limpieza, empezar con un aceite o bálsamo limpiador y luego continuar con el limpiador acuoso.
2. Exfoliación (2-3 veces por semana)
La piel glass necesita estar libre de células muertas para reflejar bien la luz. Elegir una exfoliación suave, preferiblemente quíy empiemica (con AHA como ácido láctico o glicólico), para alisar sin agredir.
3. Tónico hidratante.
Este paso ayuda a equilibrar el pH y empieza a preparar la piel para absorber los siguientes productos. Elegir uno con ingredientes como agua de arroz, centella asiática o ácido hialurónico.
4. Esencia o bruma facial.
Un extra de hidratación ligera que penetra en capas profundas. Rociar una bruma hidratante o aplicar una esencia a palmaditas suaves. Ayuda a conseguir ese efecto de piel rellena y luminosa.
5. Sérum hidratante o iluminador.
Escoger un sérum con ingredientes como niacinamida, ácido hialurónico, vitaminaaC o peptidos. Os dará firmeza, luminosidad y textura suave al instante.
6. Contorno de ojos.
El maquillaje de glass skin requiere una mirada despierta y luminosa. Usar un contorno con cafeína o péptidos para reducir signos de fatiga y preparar la zona.
7. Crema hidratante nutritiva.
Elegir una textura rica pero no pesada. Una buena crema hidrata en profundidad y deja la piel con ese brillo natural. Si vuestra piel es muy grasa, optar por una fórmula en gel.
8. Aceite facial (opcional)
Si tenéis piel seca o buscáis un efecto más glow , podéis añadir unas gotas de aceite facial como último paso antes del protector solar. Ayuda a sellar la hidratación.
9. Protector solar luminoso.
Imprescindible para cuidar la piel y evitar que el maquillaje se oxide. Buscar uno con acabado glow o hidratante, sin efecto blanqueante.
Consejos extras para potenciar el efecto glass skin:
.- Usar una mascarilla hidratante 1 o 2 veces por semana.
.- Beber suficiente agua: la hidratación también viene desde dentro.
.- Aplicar los productos con movimientos suaves y ascendentes, sin arrastrar.
.- No olvidaros del cuello y escote en vuestra rutina.
En resumen...
Esta rutina no solo mejora la apariencia del maquillaje, sino que también transforma tu piel a largo plazo. ¡Una piel bien cuidada es la mejor base!