A partir de los 30, la piel empieza a cambiar: se vuelve un poco mas fina, menos luminosa y mas sensibles a los factores externos. Es el momento ideal para revisar tu rutina de cuidado facial y evitar algunos errores muy comunes que, sin darnos cuenta, puedan estar restándole salud y belleza a vuestra piel.
Hoy nos centramos en dos pilares esenciales: la limpieza y la exfoliación.
1. Error: No limpiar bien la piel por la mañana y por la noche
Muchas personas creen que solo con desmaquillarse por la noche es suficiente, pero incluso si no usáis maquillaje, vuestra piel acumula grasa, sudor y contaminantes.
Lo correcto:
* Por la mañana: una limpieza suave para eliminar residuos del sudor nocturno.
* Por la noche: doble limpieza (aceite + gel o crema) si usáis maquillaje o protector solar.
2. Error: Usar productos demasiado agresivos
A veces se recurre a geles muy astringentes que dejan la piel "tirante". Esto solo debilita la barrera cutánea.
Lo correcto:
* Optar por limpiadores suave, sin sulfatos, con pH neutro.
* Si tenéis la piel grasa, buscar opciones equilibrantes, no agresivas.
3. Error: Exfoliar demasiado o con productos inadecuados
La exfoliación es importante, pero el exceso puede causar irritación rojeces y envejecimiento prematuro.
Lo correcto:
* Exfoliar de 1 a 2 veces por semana, según tu tipo de piel.
* Preferiblemente exfoliantes químicos suaves (como el ácido láctico o el ácido mandélico) en lugar de los de gránulo grueso.
Consejo extra para pieles maduras:
Con la edad, la renovación celular se ralentiza, así que la exfoliación controlada es clave para mantener la piel luminosa. Si teneis piel sensible o madura, empezar por una vez a la semana con exfoliante suave, y acompañarlo siempre de una buena hidratación después.