El aceite de coco ha pasado de estar al lado de las grasas perjudiciales (porque aumentaba el riesgo de enfermedades cardiovasculares debido a su alto contenido en grasas saturadas), a triunfar como grasa saludable.
Cada vez hay una mayor evidencia científica de que las
grasas que encontramos en el aceite de coco virgen tienen un papel importante
para la salud, pues pueden mejorar los niveles de colesterol y son recomendables
para la salud cardiovascular y general.
La grasa saturada se ha relacionado con el incremento del
colesterol, pero estudios recientes indican que los ácidos grasos saturados de
cadena media del coco virgen reducen el colesterol total, aumentan el bueno (HDL)
y evitan que el LDL se convierta en una forma dañina.
El aceite de coco virgen presenta un 99,9% de ácidos grasos,
de los cuales el 91,9% son saturados. El resto de los ácidos grasos están
distribuidos en un 6,4% de ácidos grasos monoinsaturados y un 1,5% de ácidos
grasos poliinsaturados.
El aceite de coco virgen, al ser de origen vegetal, no
contiene colesterol.
Es importante leer la etiqueta: tiene que poner que es
aceite de coco virgen. Esto ya nos estará diciendo que es un aceite que no ha
sido refinado ni blanqueado y que conserva sus nutrientes y componentes
bioactivos.
Lejos de ser una moda temporal o un producto de fama
pasajera, este aceite vegetal tiene gran variedad de aplicaciones, tanto dentro
del mundo de la cosmética (bases de maquillaje, mascarillas naturales para el
pelo o tratamientos para la piel), la gastronomía (elaboración de cócteles o
repostería) como en usos medicinales y para tratamientos terapéuticos.
¿QUÉ ES EL ACEITE DE COCO?
El aceite de coco es un tipo de aceite vegetal y se obtiene
al presar la carne de dicho fruto, de tal manera que se logra un líquido que
contiene un 90% de ácidos grasos. Al ser tan graso, su proceso de oxidación es
bastante lento, por lo que se mantiene a temperatura ambiente hasta una
duración de 6 meses sin que se ponga rancio.
Es por eso que su conservación es muy sencilla y duradera.
Pero sus usos no son solo culinarios, también se utiliza a
nivel cosmético y como complemento saludable. Ya que está compuesto por los
siguientes ácidos grasos:
Ácido Láurico
Ácido Caprílico
Ácido Cáprico
Unos ácidos grasos que, consumidos con moderación, tienen grandes
propiedades beneficiosas para la salud. Además de ciertos usos cosméticos que
realzan la belleza de la piel y el cabello.
DIFERENTES TIPOS DE ACEITE DE COCO.
Por un lado está el aceite puro, sin tratamientos ni
procesos de ningún tipo. El aceite de coco virgen extra es perfecto para
utilizar como producto alimenticio, ya que conserva todos los atributos de esta
fruta tropical, como son el hierro, el potasio, la vitamina C, o el de sobra
conocido ácido fólico (muy bueno para la sangre o durante el embarazo).
El mejor aceite de coco es el puro, aceite de coco virgen
extra y sin refinar, es ideal para todos los usos, incluyendo el alimentario.
Sin embargo, para la piel y el cabello se puede utilizar el refinado, del cual
también podemos obtener muy buenos resultados, pero es algo más barato.
Aceite
de coco refinado, más aplicaciones pero menos propiedades:
Al procesar industrialmente el producto, le quitan el sabor
y el olor natural a coco. En este caso se aprovechan otras propiedades como
puede ser, en el campo de la cosmética, el aportar suavidad y textura agradable
a las cremas.
Debido a su viscosidad, podemos encontrarlo refinado y
convertido en mantequilla, como base para las barras reconstituyentes para
labios o algunas cremas tapa poros.
PROPIEDADES DEL ACEITE DE COCO.
Aceite de coco para adelgazar: ayuda a perder peso
y quemar grasas.
Un 90 % de las grasas que contiene el aceite de coco son
grasas saturadas, en concreto, triglicéridos de cadena media.
De acuerdo con un estudio, los triglicéridos de cadena media
pueden aumentar el consumo energético diario hasta un 5 % (120 calorías), lo
que a largo plazo puede provocar una pérdida de peso considerable.
Asimismo, la metabolización de estos ácidos grasos produce
unos compuestos químicos, llamados cuerpos cetónicos, los cuales tienen un
efecto reductor del apetito que también puede resultar en una disminución de
peso a largo plazo.
Por otro lado, el aceite de coco también parece ser muy
eficaz a la hora de reducir la grasa que se acumula en el abdomen y alrededor
de los órganos.
El aceite de coco aumenta el colesterol “bueno” y
disminuye el “malo”.
Según diversos estudios, las propiedades del aceite de coco
ayudan a reducir los triglicéridos, el colesterol total y el colesterol LDL
(malo) y eleva los niveles de colesterol HDL (bueno).
Además, también provoca una mejora en los factores de
coagulación sanguínea y los antioxidantes.
Reduce los ataques epilépticos y los síntomas de
Alzheimer.
Los cuerpos cetónicos que se producen al metabolizar los
triglicéridos de cadena media ayudan a reducir las crisis en niños que padecen
epilepsia.
El elevado contenido de ácidos grasos de cadena media
presente en el aceite de coco favorece la concentración de cuerpos cetónicos en
el organismo y lo convierte en una terapia muy eficaz en el tratamiento de la
epilepsia refractaria a los fármacos.
Por otro lado, el consumo de triglicéridos de cadena media
provoca una mejora inmediata en las funciones cerebrales en pacientes con
Alzheimer leve.
Esta enfermedad se debe a una reducción en la capacidad de
convertir la glucosa en energía en ciertas partes del cerebro y, los cuerpos
cetónicos podrían ser una fuente de energía alternativa para las células
cerebrales.
El aceite de coco puede matar patógenos.
Cerca de la mitad de las grasas presentes en el aceite de
coco son ácido láurico, un componente con propiedades antimicrobianas que mata
eficazmente los patógenos como las bacterias, los virus y los hongos.
Además, cuando nuestro organismo digiere el aceite de coco,
se forma un monoglicérido llamado monolaurina, un ácido graso de cadena media
(y ácido graso saturado) que se encuentra en el aceite de coco y en la leche materna
humana con propiedades antimicrobianas.
Como producto cosmético.
El aceite de coco puede mejorar la hidratación de la piel y
aumentar el contenido de lípidos de esta.
Además, el aceite de coco puede servir como protector solar
y capilar.
Asimismo, gracias a sus propiedades antimicrobianas puede
usarse como enjuague bucal, matando las bacterias de la boca, reduciendo el mal
aliento y, por tanto, mejorando la salud bucal.
USOS MÁS FRECUENTES DEL ACEITE DE COCO.
Las propiedades del aceite de coco están muy valoradas en el
campo de la cosmética y muchos productos de belleza lo tienen entre sus
componentes.
Para
quemar grasa abdominal.
Uno de los usos más extendidos del aceite de coco se basa en
la estupenda combinación de ácidos que posee, lo que lo hace ideal para
incentivar cambios en el metabolismo.
Su uso dentro de la dieta ayuda a quemar grasa acumulada
principalmente en la zona abdominal, una zona bastante difícil a la hora de
adelgazar y en la que cualquier ayuda es poca si necesitamos quemar grasa.
Esto es por que otorga elementos que ayudan en la oxidación
de las grasas y estimula al cuerpo a consumir estas reservas energéticas.
Acondicionador
natural para el cabello.
Su composición penetra con facilidad en el pelo y actúa con
mayor eficacia que muchos acondicionadores artificiales, además de conseguir
hidratar el cuero cabelludo, también los minerales que contiene ayudan para
evitar su caída prematura.
Hidratante
para la piel.
Si sufrís sequedad en las manos o tenéis problemas en la
piel o los labios, es un remedio casero infalible, ayuda a la hidratación y
calma la picazón, por eso es tan usado en muchas cremas.
Ayuda
a la cicatrización.
Tras una contusión, herida o quemadura, las cualidades
naturales del aceite de coco actúan de forma muy eficaz. Primero proporcionan
un alivio sintomático inmediato, hidrata la zona y no permite que la quemadura
quede expuesta al crear una barrera protectora, y gracias a los minerales que
contiene ayuda a cicatrizar y regenerar el tejido dañado.
Desodorante
natural.
Si no os gusta utilizar productos químicos y embadurnar
vuestra piel con alcohol, el desodorante más eficaz que existe es la
combinación de polvo de almidón de maíz, bicarbonato de sodio y unas gotitas de
este aceite natural para dar un agradable perfume.
Ingredientes:
1/4 taza de bicarbonato de sodio (absorbe la humedad y
desodoriza)
1/4 taza de almidón de maíz (absorbe la humedad)
4 cucharadas de aceite de coco (antibacterial y antifúngico)
Preparación:
Simplemente mezclamos estos tres ingredientes y obtenemos un
desodorante solido capaz de mantenernos libres de malos olores todo el día,
pero si queréis mejorar la misma podréis agregar:
10 gotas de aceite esencial de lavanda, árbol de té o
eucalipto
5 gotas de aceite de oliva extra virgen o germen de trigo o
una capsula de vitamina E
Con esto mejorareis la formula y obtendréis mejores
resultados.
Aceite para masajes.
Simple pero efectivo, su textura y su aroma son muy
agradables para dar masajes, además aporta un factor añadido hidratando la
piel.
Después
del afeitado o para la hidratación de la barba.
Una forma natural y muy efectiva de tratar las barbas
pobladas es aplicar con frecuencia un aceite de coco después de lavar y peinar
suavemente. También es útil para después del afeitado, ya que unas friegas con
este aceite calman la irritación y ayudan a recomponer la piel de cualquier
pequeño corte.
Quita
tapones y molestias en los oídos.
Unas gotas de este aceite ligeramente tibio durante unos
segundos en el oído es capaz de hacer maravillas si tenéis tapones en los oídos
ocasionados por un cambio de presión o
por agua. Hay que tener mucha precaución que el aceite no esté muy caliente.
Como
pasta de dientes.
En la antigua India, en la medicina ayurveda se enjuagaban
con aceite de coco para limpiar los dientes, y de hecho el aceite de coco se ha
comprobado que elimina las bacterias que ocasionan las caries.
CÓMO USAR EL ACEITE DE COCO PARA MEJORAR LA SALUD
Para estimular una mejor función tiroidea, consumir
diariamente
Puede ayudar a aliviar los síntomas asociados con la
psoriasis y los eccemas.
En caso de rinitis o resfriado, proteje la piel interna de
las fosas nasales con aceite de coco.
Consumir 1 cucharada al día para equilibrar los niveles de
colesterol y triglicéridos.
Para tratar la piel quemada por el sol o el frío.
El aceite de coco es una fuente inmediata de energía que no
se acumulará como grasa corporal.
Cuando se consume regularmente, puede ayudar a perder peso.
Para estimular el sueño produciendo melatonina, tomar un
vaso de té de hierbas con 2 cucharaditas de aceite de coco un poco antes de ir
a dormir.
Una cucharada de aceite de coco disuelto en un vaso de té
caliente puede ayudar a aliviar el dolor de garganta.
La ingesta diaria de aceite de coco estimula la absorción de
calcio y magnesio.
Si se toma regularmente, puede aumentar la producción de
hormonas.
Seca naturalmente las heridas frías.
La ingesta diaria de aceite de coco puede ayudar a reducir
los síntomas de alergia.
La ingesta diaria de aceite de coco aumenta la capacidad de
concentración.
La ingesta de aceite de coco es óptima en el tratamiento de
infecciones micóticas como la candidiasis.
El aceite de coco es un excelente lubricante vaginal que no
altera la flora vaginal.
El aceite de coco tiene una acción antioxidante, ayuda al
cuerpo a combatir el exceso de radicales libres y a prevenir los signos de
envejecimiento.
El aceite de coco puede tener una acción regularizante sobre
los niveles de insulina cuando es consumido regularmente por los diabéticos.
Ayuda a la curación de la piel y la curación de los procesos
infecciosos.
Puede aliviar los síntomas asociados con las hemorroides
cuando se aplica localmente.
Se ha utilizado como complemento para reducir los síntomas
de la epilepsia y el Alzheimer.
Una cucharada de aceite de coco con té caliente ayuda a
recuperarse más rápido de los resfriados y la gripe.
La ingesta diaria de dos cucharaditas de aceite de coco
ayuda a reducir la grasa en el área del abdomen y sirve para mantener el peso
bajo control.
USO COSMÉTICO DEL ACEITE DE COCO.
Limpiador, desmaquillante e hidratante.
En jabones caseros para una piel suave y lisa.
En desodorantes caseros, mezclados con bicarbonato de sodio.
En lociones caseras para uso cosmético.
Ideal para la limpieza de pestañas y párpados, desmaquilla
todo tipo de maquillaje, incluso aquellos que son impermeables.
Un exfoliante corporal suave, mezclar: (a partes iguales
aceite de coco y azúcar moreno) frotar suavemente sobre la piel de todo el
cuerpo antes de entrar en la ducha.
Protege los labios tanto en climas fríos como calurosos y
está especialmente indicado cuando hay viento seco.
Para el acné, utilizar regularmente como loción limpiadora e
hidratante.
Para talones y codos agrietados, mezclar aceite de coco y
sal fina al 50%, una vez hecha la mezcla aplicarlo dando masajes para eliminar
la piel seca.
El aceite de coco es una excelente loción para después del
afeitado (una gota de aceite esencial de tomillo tendrá un mejor efecto en la
curación).
Como desodorante natural es antibacteriano, cuida la piel
y mantiene a raya los malos olores.
Se puede utilizar directamente como una crema antiarrugas,
ya que previene las arrugas y reduce las marcas de expresión.
Como aceite de baño porque tiene poder detergente.
En las uñas es útil para suavizar las cutículas, fortalecer
las uñas y tratar las infecciones por hongos.
CÓMO UTILIZAR EL ACEITE DE COCO EN LA COCINA.
Se puede utilizar en pasteles y panes, como sustituto de la
mantequilla u otras grasas y como sustituto de los huevos, para los veganos.
Aporta energía, una cucharada de aceite de coco al día, en
ayunas, con muesli o similar es un desayuno ideal.
Se puede añadir al café para obtener una bebida cremosa.
Las grasas de cadena media contenidas en el aceite de coco
estimulan el metabolismo y reducen el colesterol y los triglicéridos.
La ingesta diaria de aceite de coco con alimentos estimula
el cerebro.
Cambiar la mantequilla por aceite de coco, en las recetas de
galletas o tartas, las convertirá en más sanas y sabrosas.
Una cucharada de aceite de coco mezclado con una de semillas
de chía, en ayunas, se convierte en un laxante natural.
En cualquier receta podéis sustituir el aceite vegetal por
aceite de coco, y os facilitara innumerables beneficios para la salud en
general.
Sustituyendo la mantequilla o la mermelada por una cucharada
de aceite de coco sobre el pan tostado obtendréis un desayuno más saludable.
Para condimentar ensaladas mixtas de verduras, legumbres o
cereales.
COMO UTILIZAR EL ACEITE DE COCO EN LA ESTETICA.
Si aplicáis aceite de coco en la piel os aportará una mayor
luminosidad y suavidad.
Evita las estrías durante el embarazo o en las caderas y los
senos en caso de pérdida de peso.
Todo el aceite de coco tiene un factor natural de protección
solar correlacionado con el FPS 4.
Elimina restos de cera después de la depilación y evita
enrojecimientos en la piel.
Para reducir la celulitis, masajear diariamente con aceite
de coco en las zonas afectadas.
Puede ayudar a reducir la aparición de venas varicosas
cuando se usa tópicamente.
CÓMO UTILIZAR ACEITE DE COCO EN LA HIGIENE BUCAL.
El aceite de coco es excelente para la limpieza oral y el
cepillado de dientes, puro o mezclado con bicarbonato de sodio.
Para la salud de las encías, usar aceite de coco con una
gota de aceite de orégano.
Internamente, como parte del tratamiento para ayudar a
remineralizar los dientes.
CÓMO UTILIZAR ACEITE DE COCO EN EL CABELLO.
Después del lavado, utilizar una pequeña cantidad de aceite
de coco para reducir el volumen del cabello y ayudar al peinado.
Puede usarse como bálsamo y suavizante después de lavar el
cabello.
Puede utilizarse como mascarilla de prelavado para dejar el
cabello suave y brillante.
Masajear el cuero cabelludo con aceite de coco para prevenir
la caída del cabello y promover el fortalecimiento de las raíces.
También podéis utilizar el aceite de coco para rizar el cabello.
Cómo tratamiento anticaspa, masajear el cuero cabelludo con
aceite de coco, dejar reposar unos minutos y lavar como de costumbre.
Como mascarilla protectora en caso de exposición prolongada
al sol, el viento o el frío intenso ayudarán a que vuestro cabello se vuelva
más sano y brillante.
CÓMO UTILIZAR EL ACEITE DE COCO EN NIÑOS Y BEBES.
Mezclado con vinagre de manzana, el aceite de coco es un
excelente tratamiento contra los piojos. Untar por el pelo y dejarlo por un
rato. Luego lavarlo normalmente. Repetir hasta que todos los piojos hayan
desaparecido completamente.
Para el cuidado de la piel de los recién nacidos y para
masajes relajantes, en lugar de aceites sintéticos.
Para proteger los pezones durante el periodo de lactancia,
evitando la formación de grietas y aliviando los síntomas de irritación y
laceración de la piel.
Para eliminar la seborrea de los bebés, masajear toda la
cabeza con aceite de coco y dejarla durante unos minutos. Luego lavar
suavemente con la ayuda de una toalla tibia.
Unas cuantas cucharadas de aceite de coco en el agua del
baño del bebé tendrán un efecto calmante y desinfectante.
Podéis aplicar aceite de coco en todos los casos de
erupciones cutáneas como eccema, queratosis capilar o acné infantil. Aplicar
diariamente, con suaves masajes, hasta la completa remisión de la erupción.
En erupciones papulares, aplicar directamente sobre la
lesión para acelerar la cicatrización y aliviar las molestias del niño.
CÓMO USAR EL ACEITE DE COCO EN GATOS Y PERROS.
El aceite de coco puede ser utilizado en todos los problemas
de la piel de las mascotas – con masajes locales, baños o compresas.
Como un repelente natural de garrapatas y pulgas.
Como un suplemento dietético que ayuda a la digestión,
fortalece los huesos y el sistema inmunológico.
Podéis frotar el aceite de coco por el pelo de los animales
ya que les calma la comezón, en caso de dermatitis, hidrata la piel seca y cura
las heridas, dejando el pelo más sano y brillante.
El aceite de coco es ideal para ayudar a limpiar el interior
del pabellón auricular de una mascota.
Cuando se añade al champú para el baño, añade brillo e
hidratación al pelo de vuestra mascota.
También se puede utilizar como crema desenredante para el
pelo de su mascota.
ACEITE DE COCO PARA USO DOMESTICO.
Es muy bueno para la limpieza y conservación de las ollas de
hierro, sartenes y paelleras.
Puede ayudar a reducir la picazón de las picaduras de
mosquitos.
Es genial como crema de manos.
Se convierte en un repelente natural cuando se mezcla con
romero, menta o sus aceites esenciales.
Se utiliza antes de entrar en la piscina para reducir la
exposición de la piel y el cabello al cloro y a otros productos de tratamiento
de agua.
Para limpiar y pulir muebles de madera.
Para pulir y limpiar las hojas de las plantas de interior.
¿QUÉ CANTIDAD DEBEMOS CONSUMIR DIARIAMENTE?
La cantidad depende de cada persona y del objetivo, pero
como media, 30-40 ml al día.
CÓMO PREPARAR ACEITE DE COCO EN CASA.
Ingredientes:
3 vasos de agua de coco;
2 cocos secos cortados en pedazos.
Preparación:
El primer paso es licuar todos los ingredientes en la
licuadora y colar con la ayuda de un paño limpio. A continuación colocar el
líquido en una botella debiendo permanecer en un sitio oscuro durante 48 horas.
Al cabo de este tiempo se debe colocar la botella en un ambiente fresco pero
sin sol, durante 6 horas más.
Después de las 6 horas colocaréis la botella de pie en el
frigorífico durante 3 horas más, con esto el aceite de coco se solidificara.
Para retirarlo del envase cortar la botella en el sitio donde se observa una
separación entre el agua y el aceite, aprovechando solamente el aceite que debe
colocarse en un recipiente con tapa.
VALORES NUTRICIONALES DEL ACEITE DE COCO.
Composición por cada 100 gramos de aceite de coco:
Calorías
|
862
Kcal
|
Agua
|
0 g
|
Proteínas
|
0 g
|
Hidratos de carbono
|
0 g
|
|
|
Grasas
saturadas
|
86,5 g
|
Ácido laurico
|
44,6 g
|
Ácido miristico
|
16,8 g
|
Ácido palmítico
|
8,2 g
|
Ácido caprílico
|
7,5 g
|
Ácido cáprico
|
6 g
|
Ácido esteárico
|
2,8 g
|
Ácido caproico
|
0,6 g
|
Monoinsaturadas
|
5,8 g
|
Ácido oleico
|
5,8 g
|
Hierro
|
0,04 mg
|
Vitamina E
|
0,09 mg
|
Vitamina K
|
0,5 microgramos
|